miércoles, 21 de marzo de 2012

¿QUÉ ES EL AMOR?

Voy a intentar responderme a la pregunta que pone título al post.

Lo primero que se me viene a la cabeza es que no creo que el amor sea sufrimiento, creo que es otra cosa, que es ese sentimiento hacia otra persona que nos atrae, nos completa, nos alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear (que bien define a veces la R.A.E. oye)

Si hay sufrimiento no es amor, es necesidad, dependencia, posesión, incluso desamor… pero el amor no debería hacer sufrir porque es un sentimiento positivo, de los que elevan el nivel de endorfinas hasta límites que nunca imaginaríamos cuando carecemos de él. 

Claro que podemos sufrir por la persona amada, pero entiendo que por un sentimiento de empatía, es decir, si creemos que esta sufriendo, ya sea física o anímicamente, lo lógico es que nosotros compartamos su dolor, no que no los cause el hecho de quererla.

A veces confundimos amor con el miedo a la soledad, entonces se aguantan convivencias que de otra manera serían imposibles. También hay relaciones obsesivas y masoquistas, hay actitudes tan destructivas como la posesividad, tan difícil de controlar que consigue que hasta las mejores pasiones acaben, porque el amor egoísta no es amor, y en él se vuelcan todas las inseguridades que andan escondidas en el fondo de nuestro cerebro.

Domesticar al otro es anularlo, esa manía de querer cambiar lo que no nos gusta de la otra persona es la manera más fácil de que al final el resultado nos desilusione (hay excepciones justificadas que suelen tener relación con hábitos higiénicos, de salud, dependencias o de reparto de tareas, pero no me refiero a ellas). Cuando nos enamoramos de alguien ni vemos sus defectos (esas características o actitudes distintas a la nuestra que nos hacen hasta gracia), ni nos importan, el conjunto en sí nos parece maravilloso, así que progresivamente y conforme el sentimiento de amor/pasión va relajándose los “defectos” van aumentando a nuestra vista.

Ese es el error, ese egocentrismo que impide respetar la personalidad de los demás, que considera traición la individualidad del otro, la búsqueda del propio espacio, que no es excluyente de una buena relación de pareja, sino todo lo contrario, la enriquece.

Supongo que en esto del amor, como en casi todo, la experiencia es un grado, y algunos tenemos que pasar por varias relaciones y muchos disgustos hasta que conseguimos comprender el verdadero sentido de amar y compartir que no tiene nada que ver con poseer y controlar. Como dice Jorge Drexler, uno solo conserva lo que no amarra

Y si encima tienes la suerte de encontrar a alguien con las ideas claras y el corazón enorme… te das cuenta de que los guionistas de las pelis románticas no tienen ni idea.

No deberiamos permitir que alguien se aleje de nuestra presencia sin sentirse mejor y más feliz, en definitiva, que se lleve un poco de nuestro amor, nuestro cariño, nuestra comprensión, nuestra ayuda. En nuestras manos, en nuestra firme voluntad está el conseguirlo.

En este punto releo el post y podría ampiarlo a otras muchas formas de amor, que el concerniente a la relación de pareja (el amor a los hijos, al trabajo, a los amigos, al prójimo, a uno mismo, etc.), y que extenderían en exceso, la esencia que he procurado recoger en estos párrafos, sin más intención que intentar dar respuesta a una aparente simple pregunta, y que creo se puede extender a las diversas acepciones de la palabra, del sentimiento de "Amor".

Lo importante, en todos los ámbitos de la vida, no es lo que hagamos, lo realmente valioso de nuestras obras es el amor que ponemos en cada una de ellas, eso es lo que realmente importa, tanto para nosotros, como para los que de una forma u otra, se ven afectados por nuestras acciones.

Al menos.... eso creo yo.

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario